Hola,
¿Cómo están? Yo fantástico, porque estoy de vacaciones. Ahora voy a copiar algo que tengo escrito hace tiempo y que Joaquín Tena me recomendó que pusiera porque mi punto de vista le pareció interesante. Vamos al articulín, que espero también sea interesante para Uds.
Decir que Sun Tzu estaba equivocado es temerario, ya que para la mayoría de los ejecutivos, Sun Tzu no sólo es de lectura obligatoria, sino que criticarlo es casi como criticar la Biblia. Mi posición, sin embargo, es menos dogmática y más pragmática, ya que como todos los humanos se pudo equivocar, veamos uno de sus preceptos en los que estaba equivocado:
Es ampliamente conocido el lema de Sun Tzu que dice “si conoces a los otros y te conoces a ti mismo, entonces no perderás en 100 batallas; si no conoces a los otros pero te conoces a ti mismo, ganarás una y perderás una; si no conoces a los otros y no te conoces a ti mismo, perderás todas las batallas”.
En mi opinión el axioma de Sun Tzu es cierto solamente en parte, ya que si nosotros poseemos ese conocimiento y nuestros competidores no, entonces realmente tenemos una ventaja sobre nuestros competidores y estamos en la situación descripta por Sun Tzu. A esta situación la denominaríamos “el cielo”, ya que contaríamos con un ventaja, al menos temporaria, sobre nuestros competidores.
Ahora, qué pasaría si nosotros fuésemos la víctima, es decir nuestro competidor tuviese un excelente departamento de inteligencia competitiva que le permite anticipar nuestros movimientos, entonces estaríamos en el peor de los mundos (seríamos derrotados en todas las batallas), por lo que denominaremos a esta situación “el infierno”. Mientras que si tanto nuestra empresa como nuestros competidores tuviesen sistemas similares, ninguna tendría una ventaja demasiado grande y triunfaría el que mejor supiese aprovechar ese conocimiento (de acuerdo a Sun Tzu ganaríamos una batalla y perderíamos otra). A esta situación se la podría denominar purgatorio, porque no estamos ni en el cielo ni en el infierno, pero podemos ir al infierno si dejamos caer nuestra capacidad de inteligencia competitiva o ir al cielo si nuestro competidor pierde esa capacidad.
La situación antes descripta se puede visualizar en el siguiente cuadro:
Fuente: Análisis de Midas Consulting
Como vemos la situación descripta por Sun Tzu sólo se cumple en dos de cuatro y podríamos decir que no es la más común, ya que no es la de equilibrio (la de equilibrio es la de purgatorio).
Debemos decir, sin embargo, que aún este análisis es incompleto, ya que supone que el que tiene conocimiento lo utiliza y además asume que ambas empresas (nuestro competidor y nuestra empresa) son igual de hábiles en obtener conocimiento. De más está decir que rara vez dos empresas tienen la misma capacidad de recabar informaciones del mercado.
Sin embargo, la principal enseñanza de este análisis es que hay que contemplar lo que puede hacer el competidor, ya que es en la interacción con el mismo que se aprecia cuál es la estrategia correcta. Analizar esta interacción es más importante cuanto mayor sea la interacción con el competidor.
Bueno, eso es todo por hoy, me voy a seguir disfrutando de mis vacaciones!
Lic Adrian Alvarez
Founding Partner
Midas Consulting
+54-11-4775-8983
Adrián, Adrián, 2.500 años de sabiduría son muchos años. Eres valiente, ¿eh?
ResponderEliminarSiento decirte que tu interesante análisis no acaba de convencerme. Me parece que llegas a la misma conclusión que el antiguo estratega: Lo realmente importante es conseguir alcanzar ese conocimiento, y el grado de éxito con que se haga, tanto de nosotros mismos como de los otros. Si alguien se queda a mitad de camino o su análisis no es correcto, ahí va a estar su debilidad.
No pierdas de vista la parte de conocerte a tí mismo, porque esa es la que te va a permitir saber si estás dando el correcto uso del conocimiento que tienes.
Lo siento, pero el viejo Sun me pierde. :)
Abrazos fuertes,
Eliana Benjumeda
Hola Eliana,
ResponderEliminarMuchas gracias por responder. Excelente que me respondas aquí teniendo mi dirección de mail. La verdad es que recibo muchas respuestas que no se ven reflejadas en el blog porque me las mandan a mi casilla de mail, o sea, me responden los amigos únicamente ;)
Sorry por responder tan tarde, pero he estado (estoy todavía en realidad) de vacaciones. Vamos por partes como decía Jack. Creo que la gran virtud de Sun Tzu está en hacer creer que dice lo que no dice. Dime en qué parte hace te dice que a lo mejor que puedes llegar si ambos se conocen (incluyendo el conocimiento de si mismos) es llegar a un empate y que todo se define en el margen de acuerdo a quién analice mejor y/o implemente mejor. Todo lo contrario, te dice que no correrás peligro, no te dice siquiera la situación de equilibrio, que es que ambos tienen las mismas chances. O sea, no me convences Sun Tzu sigue pareciéndome un fiasco porque no dice lo que tu dices que dice.
La conclusión que tu sacas es luego de leer el artículo que escribí, antes de leerlo te dabas por contenta con saber de los demás y ti misma sin considerar que el competidor tenía la posibilidad de hacer lo mismo y que tu posición era súper-segura.
Mi posición también es fácil, porque yo nací después que von Neumann, von Morgenstern, Nash y tantos otros que hicieron esto mucho más fácil y no me arrogo originalidad en el análisis, sólo te diría que me parece que ninguno de los que se ocupan de teoría de los juegos se ocupó del asunto, o tal vez si y yo no me enteré.
Lo de 2500 años de sabiduría tampoco lo compro, porque no se pasaron 2500 años escribiéndolo y mejorándolo (que es lo que implica 2500 años de sabiduría), sino que un buen par de generales (hay muchos que dicen que fueron varios y no sólo un Sun Tzu) escribieron esas máximas en un libro, supongamos que les llevó 20-30 años, bueno serán 20-30 años de sabiduría (que tampoco es poco) pero no 2500.
O sea, el tiempo pasó, pero el texto no se hizo más sabio, aunque he de reconocer que el libro resistió 2500 años y eso lo pone a la altura de la Biblia, aunque eso no es tan así tampoco, porque el libro se redescubrió en 1800, entonces pasó como 2300 años sin atención. Para ser justos que un libro resista 200 años también es todo un logro y no creo que mi articulín resista siquiera un par de años.
Mi principal desacuerdo con Sun Tzu es que la mayoría lo lee sin analizar y hay muchas cosas que tienen que ser leídas con bajo la lupa del tiempo, por ejemplo, hay una máxima que dice que la inteligencia debe ser obtenida de quien la tiene y no de espíritus, etc. Eso es, para mi al menos, una obviedad en el tiempo en que vivimos, ahora, hace 2500 años seguramente era una idea súper-innovadora y audaz. Para mi es un libro pintoresco, que tengo y he leído, pero no considero que sea el mejor del mundo. De hecho, es un tema difícil, pero supongo que los dos primeros de Porter, o la Mente del Estratega de Ohmae serían mis favoritos en ese tema.
Espero que no te enojes por estar en desacuerdo.
Besos,
Adrian
¡No me enojo Adrián! Me gusta mirar las cosas desde puntos de vista diferentes, y si llega el momento de cambiar de opinión porque alguien me hace verlo de otra manera, perfecto.
ResponderEliminarTengo que reflexionar sobre tu punto de vista y ver si puedes convencerme.
Solo te diré una cosa que leí este fin de semana y que hace que ninguno de los dos "nos llevemos la perra chica". Emilio Botín, es un fiel seguidor de Sun Tzu. Pero también yo, y mira que dos resultados tan distintos :)
Cuídate y hasta pronto!