Evidentemente uno de los objetivos de la inteligencia competitiva debiera ser mejorar la estrategia. De acuerdo a una encuesta realizada por McKinsey (Better strategy for business units) y mis propias conclusiones podríamos decir que la IC puede ayudar a mejorar la estrategia al:
1) Perfilar e incorporar éxitos y fracasos de la industria o la región. De acuerdo a la encuesta sólo el 39% de los entrevistados lo consideraron importante al determinar la estrategia y sólo el 21% lo utiliza frecuentemente. Creo que hay un dicho que dice algo así como los inteligentes aprenden de sus propios errores, los sabios de los errores de los otros y los tontos nunca (si nadie lo dijo, quizás me pueda hacer famoso con esto). Evidentemente me parece preocupante porque las organizaciones que no utilizan esta herramienta, ni la consideran importante nunca aprenderán ni de los errores ni de los aciertos propios y de extraños.
2) Utilizar ejemplos de otras industrias, regiones o funciones para desarrollar ideas o guiar el análisis tampoco fue considerado relevante ni útil (37% de relevancia y 22% de uso). Evidentemente no hacen demasiado benchmarking, porque benchmarking podría entrar en esta definición. Esto no es demasiado distinto de lo anterior, pero puedo decir que hay muchas analogías que se pueden realizar. De hecho, nosotros siempre usamos antecedentes de lo que ocurrió en industrias similares para encontrar paralelismos y ver cómo puede evolucionar la industria.
3) Realizar un más frecuente y mejor análisis de los competidores, ya que el 65% de los entrevistados dicen que es relevante tomar en cuenta las acciones de los competidores cuando se diseña la estrategia, pero sólo el 45% dice hacerlo. Evidentemente la IC puede ayudar a cerrar la brecha.
Tengo que decirles que uno de los principales beneficios del consultor y muchas veces una de las razones por las que vienen los clientes es por los puntos 1) y 2) porque el consultor normalmente conoce casos de éxito y fracaso de otras industrias y regiones y, de esa manera, puede agregar valor a la estrategia del cliente. De todas maneras, me parece que es algo que bien puede hacer internamente la compañía también.
Ahora bien, también podemos sacar conclusiones acerca de donde no se agrega demasiado valor (ya sea porque lo estamos haciendo bien o porque a eso lo hace todo el mundo porque son técnicas maduras)
a) Análisis de las fortalezas y debilidades. Si bien creo que más del 90% de los que hacen análisis SWOT , lo hace muy superficialmente y mal, no podemos negar que es probablemente la técnica más difundida, así que no hay sorpresas con esto.
b) Identificar tendencias más importantes para los próximos 3 a 5 años y su impacto en la organización. De nuevo las técnicas de análisis (SWOT y STEEP) están entre las técnicas más difundidas.
c) Identificar los drivers económicos del desempeño de la organización. Estimo que se refiere a los factores clave de éxito. Again, otra técnica súper-conocida.
O sea tenemos que tratar de ver incorporar lecciones aprendidas de éxitos, fracasos e ideas, propias y de la competencia o de empresas de la región o de otras industrias. Además de mejorar y realizar más frecuentemente análisis de la competencia si queremos mejorar la performance de nuestra organización.
A esto lo pueden hacer sólos (aunque a veces reconozco que quizás no haya tiempo para realizar este tipo de análisis por la vorágine en la que se vive) o contratar a una consultora, en cuyo caso espero que se acuerden de Midas Consulting.
Saludos,
Adrian
viernes, 11 de enero de 2008
En qué puede ayudar la Inteligencia Competitiva a mejorar la estrategia
Etiquetas:
Estrategia,
inteligencia competitiva
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